Impulsan programa para recuperar lagunas urbanas para los habitantes de Concepción |
Recursos Naturales | |
escrito por Tribuna del Bío Bío | |
jueves, 10 de septiembre de 2009 | |
Propuesta de trabajo con un horizonte de dos años, entregó el Centro Eula de la Universidad de Concepción a la comunidad penquista con el fin de iniciar un plan de recuperación de las cinco lagunas de la ciudad, que presentan distintos grados de deterioro ambiental. No es la primera vez que se intenta un plan de recuperación de las lagunas urbanas de Concepción. En 1994, el municipio penquista, había puesto en marcha una iniciativa para rescatar estos cuerpos de agua para la ciudad. Y hubo avances. Por ejemplo, en el caso de la Laguna Las Tres Pascualas que estaba a pasos de convertirse en un pantano. Lo mismo ocurrió con otras lagunas menos nombradas pero no menos importantes como Lo Custodio, Lo Galindo y Lo Méndez. Incluso la administración del alcalde de entonces, Ariel Ulloa estaba impulsando la creación de una Corporación de Derecho Público, integrada por personalidades de la ciudad, que se hiciera cargo de buscar los recursos necesarios para mantener un plan de protección permanente de las lagunas. Quince años después, la situación de las lagunas sigue siendo preocupante, razón que motivó al Centro Eula de la Universidad de Concepción a desarrollar una propuesta para impulsar un Programa de Investigación Científica para restaurar ambientalmente los lagos urbanos de Concepción. Detalles de esta iniciativa fueron dados a conocer este miércoles, en el marco del Seminario “Recuperemos las lagunas para los habitantes de Concepción”. Al hablar de la situación ambiental de las lagunas de Concepción, Oscar Parra, director del Centro Eula recalcó que la ciudad posee un patrimonio hídrico natural único, conformado por las cinco lagunas interurbanas, el río Bío Bío y el Andalién, “que otorgan a la capital de la Región del Bío Bío, características ambientales no encontradas en las ciudades del resto del país”. Sin embargo, acota, los penquistas “parecen no darse cuenta de ello, ya que la condición ecológica de estos cuerpos de agua dan cuenta de un abandono, despreocupación y falta de políticas permanentes para lograr su recuperación y uso pleno por parte de la ciudadanía”. Y es que no muchas ciudades del país e incluso del mundo pueden darse el lujo de contar con tantos espejos de agua naturales en su territorio. Su origen se remonta a más de 6.400 años. Lo complejo, dicen los especialistas, es que lo la naturaleza tardó tanto en formar, la acción humana se ha demorado muy poco en degradar. Es así como según lo explicado por Oscar Parra, las lagunas de Concepción el estado actual de las lagunas muestra que tienen condiciones de eutrófica a híper eutróficas, con baja transparencia de las aguas, alto contenido de nutrientes, especialmente compuestos de nitrógeno y fósforo, episodios de falta de oxígeno y en general mala calidad de las aguas…”Estas condiciones afectan el estado ecológico y la calidad estética”. A todo esto se llegó por un crecimiento urbano no siempre controlado y por la poca preocupación y poco respeto de la propia ciudadanía en cuanto a cuidar estos recursos, precisa Parra. ¿Qué podemos hacer para recuperar estos cuerpos de agua? Se pregunta el director del Eula y responde que hay varias acciones que se pueden impulsar para ello, como la mantención de información científica actualizada y la definición de los usos de estos cuerpos de agua. Junto con ello se requieren acciones políticas ciudadanas para apoyar a las autoridades en la obtención de recursos y colaborar en la conservación de estos recursos. “Una ciudad como Concepción -dice Parra- se merece un plan de recuperación de sus lagunas, lo cual sin duda redundará en un mejoramiento de su imagen urbana y espacios con mejor calidad de vida para sus habitantes”. Desafío para la gestión comunal Luego de la intervención de Oscar Parra, habló la asesora urbanista de la Municipalidad de Concepción, Karin Rudiger, quien se refirió a las “Lagunas Urbanas de Concepción como oportunidades de valorización d la identidad y calidad de vida”. Planteó que las lagunas “constituyen los elementos naturales más próximos a la experiencia cotidiana de los habitantes, lo que también ha determinado tanto la degradación de ellas como su interés por recuperarlas e integrarlas al paisaje urbano”. Recordó que el Plan Regulador de 1962 estableció dentro de sus objetivos “la conquista y preservación del paisaje natural de Concepción”. Transcurridos veinte años de su aplicación, agregó, tal objetivo no se había cumplido. Esto, debido a que la política urbana de los 80, caracterizada por la liberalización del mercado de suelo, “produjo instrumentos de planificación territorial carentes de visión en lo referido a la conservación del paisaje y los recursos naturales”. Pese a ello, se emprendieron esfuerzos para revertir el deterioro de las lagunas y su entorno adyacente, y si bien hubo efectos puntuales, no fueron suficientes para lograr una mejora sustancial de estos cuerpos de agua, señaló la urbanista. El Plan Regulador de 2004 asume la situación de deterioro de las lagunas y propone medidas de conservación, así como de integración de ellas a la trama urbana. Pero esto requiere un programa concreto para hacerlo realidad, recalcó. La propuesta de Eula Fue el investigador y académico del Eula, Roberto Urrutia, quien presentó el Programa de Investigación orientado a la recuperación de las lagunas. Se trata de una iniciativa pensada para dos años, en la que una de las acciones fundamentales es la realización de un completo diagnóstico ambiental de las lagunas, para conocer su estado actual, principales problemas, fuentes, etc. Junto con ello, es preciso definir los usos que se le darán a las lagunas, algo que, precisó, debe definirse con la participación de los vecinos. Asimismo, recalcó, se debe diseñar un plan de recuperación específico para cada laguna, pues no se puede aplicar el mismo para las cinco lagunas. “Cada lago es distinto y por lo mismo requiere una solución específica”. Otro aspecto es definir las acciones de recuperación que se realizarán y priorizar con qué lagunas se partirá inicialmente. Urrutia reiteró también que los tiempos de recuperación de una laguna son largos, por tanto no se pueden esperar resultados inmediatos una vez aplicadas las acciones correspondientes. Por Tribuna del Bío Bío Concepción, 10 de septiembre de 2009.- |